Por qué no decir Habemos muchos que…

No es simpático andar por ahí corrigiendo la manera de hablar de las personas. Sin embargo, desde hace algún tiempo (años, en realidad) es muy común escuchar en México a muchas personas, no solo en redes sociales, sino en los medios de comunicación (y en la vida diaria, por supuesto), expresarse empleando el verbo haber de manera incorrecta. 

Habemos muchos que no estamos de acuerdo en que…, Habemos muchos que deseamos un mejor servicio…, etcétera. El verbo haber, cuando se emplea solo, no como auxiliar en los tiempos compuestos (Hemos vivido mucho, Han corrido con mala suerte, etcétera), es impersonal. En el caso de los ejemplos anteriores, ¿cuál sería una forma mejor de expresarse? Empleando el verbo ser, más el pronombre definido correspondiente: “Somos muchos los que no estamos de acuerdo en que…”, “Somos muchos los que deseamos un buen servicio…”

Manuel Seco, en su Diccionario de dudas y dificultades de la lengua española, consigna varios usos del verbo irregular haber: entre los principales, se usa en perífrasis que indican obligación; como verbo auxiliar para formar los tiempos compuestos; como arcaísmo en algunas construcciones literarias, y para expresar presencia en oraciones impersonales. En este caso, debe conjugarse solo en tercera persona de singular. Cito a Seco:

Cuando se desea expresar la presencia de una 1ª. o una 2ª. persona, no se emplea haber, cuyo uso impersonal sólo se refiere a terceras personas. […] en este uso impersonal la persona o cosa referida es complemento directo y no sujeto, [por lo cual] no es aceptable una construcción como Habíamos solo tres personas en la sala. En casos como este se emplea el verbo estar: Estábamos solo tres personas en la sala

Y hay otras maneras de expresar la misma idea. Usando el verbo ser, por ejemplo: Éramos solo tres personas en la sala. Así, Habemos muchos que opinamos lo mismo, forma incorrecta, puede transformarse en Somos muchos los que opinamos lo mismo

Afirma Seco que en algunas regiones de España, y en algunos países de Latinomérica también (es el caso de México), concordar el verbo haber con nosotros, tiene más expresividad en la lengua coloquial que la forma más culta, representada por el ejemplo Estábamos solo tres personas en la sala

Sin embargo, la concordancia de haber con un sujeto plural, nosotros, se escucha y lee hoy con mucha frecuencia en México, en diversos medios de comunicación, e incluso en el habla y la escritura no necesariamente populares.

Se trata, además, de una confusión de partes de la oración. En el siguiente caso: Había tres personas en la sala, el sujeto de la oración no es tres personas, sino el complemento directo del verbo haber. Por eso, ahí no debe concordar el sustantivo personas con el verbo haber, ya que, recordemos, en este caso, es impersonal. Habemos tres personas en la sala, Habían cinco sillas, Habrán muchos que dirán lo contrario, etcétera, son todos casos de construcciones perfectamente incorrectas. ¿Lo correcto? Hay tres personas en la sala (o, si queremos incluirnos, Estábamos –o éramos– tres personas en la sala); Había cinco sillas; Habrá muchos que dirán lo contrario.

No obstante, como me dijo una querida amiga, las personas hablan como pueden, no forzosamente de manera correcta. Pero en círculos incluso llamados «cultos», esta forma se está empleando cada vez más. Ojalá los hablantes reflexionáramos un poco más en la gramática, en la bella sintaxis del español.

Tal vez, con el tiempo, si se siguen usando estas construcciones a diestra y siniestra, las academias de la lengua incluso las lleguen a aceptar como válidas. Vivir para ver…